“UN MUNDO DISTRAIDO“

 

 

Esta reflexión va dirigida a una entrevista que realizó una periodista a Nicholas Carr que fue director del Harvard Business Review y que escribe sobre tecnología desde hace casi dos décadas. La entrevista viene a ser realizada por la publicación que hace de un nuevo libro titulado “Superficiales”.

Carr cuenta en su libro cómo internet nos está transformando en nuestras formas de pensamiento social: la creación de la cartografía, del reloj y la más definitiva, la imprenta. Ahora, más de quinientos años después, le ha llegado el turno alefecto Internet.” (Car, N.) Hay que tener en cuenta que lo que Carr defiende no es el conservadurismo cultural sino todo lo contrario puesto que él es un gran consumidor de internet a todas horas.

Bajo nuestro punto de vista hemos de decir que sí que estamos de acuerdo con lo que se recoge en la entrevista a Carr, puesto que consideramos que internet es una herramienta bastante útil para determinadas tareas u acciones, como pueden ser búsquedas rápidas o la capacidad de realizar varias acciones “al mismo tiempo”.

Pero, por otro lado, también compartimos  hasta cierto punto la idea de que es una herramienta poco apropiada para determinadas tareas, sobre todo, de concentración como puede ser leer un libro o tener un pensamiento de crítica. Si creemos que somos nosotros los que decidimos elegir los tiempos y momentos de usarlo estamos realmente equivocados puesto que a la vista está que crea dependencia y hace que nuestras elecciones se vean influenciadas por ella (la red).

El tema de la privacidad, no es para dejarlo pasar por alto. Con el consumo masivo de internet sí es cierto que éste maneja multitud de datos nuestros y de millones y millones de personas, pero que en realidad no somos capaces de percibir hasta qué punto esta herramienta nos controla.

Nuestra dependencia a la red es tan elevada que ni somos conscientes de hasta qué punto, sobre todo las redes sociales, nos absorben hasta agotarnos todo el tiempo libre que tenemos.

Para finalizar, decir que es necesario tener un control sobre el uso de las nuevas tecnologías, puesto que son un arma de doble filo que si no sabemos sobre llevarlas pueden volverse contra nosotros y anularnos en muchos aspectos ya mencionados en párrafos anteriores.